by Stephania Pettitheiler
El proyecto nació en una clase de Environmental cuando empezamos a ver el tema de plastic pollution. Vimos un documental de Netflix, 'A Plastic Ocean' con el cual todos quedamos muy impresionados. Nunca antes habíamos visto algo así. Ahi entendimos que nuestra conciencia sobre los desechos que generamos y el impacto que tienen en el mundo era muy vaga. Decidimos, con esta nueva mirada, compartir este tema en el AWE day para que la gente que, como nosotros antes, pensaba tener idea sobre la contaminación del plástico, pudiese ver realmente lo que era.
De esta charla nació nuestra necesidad de ir más allá del concientizar, y comenzar a tomar acción sobre lo que nosotros, como estudiantes y como colegio, podíamos hacer. Los alumnos interesados en llevar a cabo el proyecto conformaron un grupo con profesores que estaban al tanto y quisieron involucrarse. Concluimos en un objetivo básico y esencial: comenzar a separar la basura que producimos, viendo las cantidades que generamos con nuestras costumbres y estilo de vida.
El proceso tuvo algunas complicaciones. Teníamos que avanzar con los recursos que había. Usamos los mismos tachos que se encontraban en el colegio sin poder pintarlos, ya que ya habían sido pintado por alumnos dentro de su proyecto CAS. Al mismo tiempo, nos contactamos con el Municipio de Vicente López para solicitar tachos separados y constatar que lo que separemos realmente fuera a un sitio de reciclado. La municipalidad aprobó nuestra petición y nos otorgó el titulo para conformar lo que se llama un 'Colegio Sustentable'. Al mismo tiempo tuvimos que pensar quién se va a encargar de juntar toda esta basura por separado y ubicarla en donde corresponde para que sea recolectado correctamente. El equipo de limpieza ya contaba con un esquema de recolección, y los distintos tachos sumaban tiempo y trabajo, por lo que comenzamos separándolos nosotros. La instalación de los tachos fue aprobada por el colegio pero el proceso se detuvo en la aprobación de presupuesto y su compra, ya que la plata tenía que salir de algún lado y no contábamos con ningún tipo de fondos. Ese camino se detuvo ahí y seguimos esperando notificaciones sobre eso.
Por otro lado, desde un comienzo del proyecto teníamos ganas de hacer esta campaña visible creando tachos interactivos para tratar de conseguir la atención de la gente. Ese caminó resulto en un último diseño que hicimos con el departamento de arte, aprobado por el colegio, que cuenta con una intervención del suelo del patio en forma de caminos que abarquen todo el patio, del color de cada clasificación de basura, que guíen desde cualquier punto del patio hasta el tacho correspondiente para ese desecho. Estando a semanas de finalizar este año escolar, decidimos dejar esta propuesta para inaugurar el año que viene y centrarnos en clarificar y corregir la clasificación de los tachos dispuestos, ya que notamos que las divisiones no estaban claras y confundían a todo el que quería ayudar con la separación, resultando en desechos mal dispuestos que echaban a perder toda lo que se encontraba con ello en ese tacho. Con la noticia de la nueva norma que prohíbe cualquier tipo de delivery de comida dentro del colegio, decidimos acompañar la propuesta con tachos pintados acordes a su clasificación y así poder contar con un sistema más claro teniendo en cuenta que las cantidades de plásticos con las que contábamos por parte de los deliverys de comida iba a disminuir significativamente.
Comments